jueves, 5 de noviembre de 2009

BOLDO



Descripción.


Antes de la llegada de los españoles, el boldo era una planta ampliamente usada por varios grupos indígenas del país. Específicamente, los mapuches “atacaban al reumatismo y las luxaciones con el boldo” (Gusinde, 1917).


El boldo es una planta altamente valorada por sus efectos medicinales, y desde comienzos del siglo pasado, ha recibido la atención de naturalistas y científicos. Actualmente, el uso del boldo se encuentra difundido prácticamente en toda la población del territorio nacional, así como en muchos lugares del mundo. De hecho, es la especie nacional más difundida a nivel mundial, ya que tiene comprobadas propiedades curativas, las que además resultan excepcionales, pues posee, al mismo tiempo, alcaloides, aceites esenciales y flavonoides.


Entre los alcaloides que contiene el boldo, se destaca la boldina, que estimula la producción de jugos gástricos y de bilis, aumenta la secreción de urea y ácido úrico, y tiene un efecto ligeramente hipnótico. Dentro de los aceites esenciales, se ha encontrado eucaliptol, ascaridiol y p-cimol, sustancias de propiedades antiinflamatorias y carminativas.


Las propiedades del boldo pueden resumirse en las siguientes: es un estimulante de la digestión, es colagogo y colerético. También tiene propiedades sedantes sobre el sistema nervioso. Hay coincidencia entre todos los investigadores en estas propiedades medicinales, aunque hay otros que también sugieren el uso del boldo para otros problemas de salud, como por ejemplo, para aliviar molestias dentarias, dolores reumáticos, etc.

Sugerencias para el Uso del Boldo.


Infusión: (como estimulante digestivo y sedante nervioso). Se prepara con algunas hojas de boldo, sobre las cuales se agrega agua hervida. Se toma caliente, de preferencia después de las comidas.


Cataplasma: (neuralgias y dolores reumáticos). Se cuecen hojas en una pequeña cantidad de agua y luego se aplican sobre la zona adolorida, afirmadas con un paño limpio.


Baño: (para los dolores reumáticos). Se hace hervir un puñado grande de hojas en un tiesto, con dos o tres litros de agua. Luego, se cuela y se agrega este líquido al baño. La indicación es bañarse durante media hora a 35 º C. (Se puede agregar una taza de sal de mar y una cucharada de bicarbonato.)

No hay comentarios:

Publicar un comentario